viernes, 9 de octubre de 2009

Dime en qué trabajas y te diré como comes

Las cada vez más dilatadas jornadas de trabajo y la falta de tiempo para sentarnos a comer con tranquilidad, hacen que muchas veces no nos alimentemos de la forma más adecuada. La mayoría de nosotros no lo hacemos, pero los expertos recomiendan elegir el menú diarioteniendo en cuenta, entre otras a qué nos dedicamos.

Desde la Asociación Cinco al día, encargada de promover entre la población el consumo de frutas y verduras, nos dan algunos consejos para conseguir adecuar nuestra dieta a nuestra actividad diaria:

Trabajo sedentario: En este tipo de trabajos, el gasto energético es mucho menor y , por lo tanto, el consumo también debe serlo. Además, el hecho de tener que estar sentados frente al ordenador durante mucho tiempo, puede acarrearnos problemas no solo oculares y de espalda, sino también de obesidad.

Por ello, quienes tengan uno de estos trabajos deben ingerir alimentos que aporten vitaminas, minerales, fibra y proteínas de calidad pero que no tengan un exceso de calorías. No pueden faltar frutas y verduras ni las hortalizas de hoja verde, muy ricas en antioxidantes y bajas en energía, excelentes para mejorar los problemas circulatorios en las extremidades inferiores, cuyo riego se ve afectado por posturas incorrectas o posiciones continuadas.

Trabajos de alto gasto energético: En este tipo de trabajos es mucho más importante cuidar la alimentación, ya que una ingesta deficitaria de nutrientes puede llevarnos a problemas no deseados como lipotimias, cansancio extremo, falta de sueño o bajadas de tensión. Alimento que normalmente quitamos de nuestra mesa por considerarlo demasiado calóricos están permitidos y aconsejados en estos casos. No deben faltar el pan, las legumbres, el arroz, etc., además de otros alimentos ricos en proteínas como los huevos, la carne o el pescado. Sin embrago, dado que también es importante cuidar que no haya un exceso energético demasiado elevado en lo que comemos, podemos acoparlos con hortalizas frescas o cocinadas. Para el postre, la fruta sigue siendo la opción más recomendada por los expertos.

Fuente: Tratamientos de Obesidad.com

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